Tú eres resiliente -5 Características que demuestran que lo eres-

La capacidad de levantarnos de las caídas, de recuperarnos de las dificultades y las decepciones, de salir adelante, de crear herramientas para vencer el problema, solucionarlo y seguir caminando hacia nuestras metas y objetivos; es resiliencia. Estuve pensando en unas características que nos dicen, que en realidad muchos de nosotros, sí somos resilientes.

Como término, la resiliencia conceptualiza la capacidad que tenemos de salir fortalecidos de circunstancias negativas; sin embargo, muchos científicos de la conducta alegan que es bueno que el término nos conecte con la capacidad de resolver situaciones difíciles, pero también con la capacidad y fortaleza que vamos creando en nuestra vida para no destruirnos o desequilibrarnos ante las circunstancias difíciles.

Sí bien nosotros como organismos vivos tenemos la capacidad de adaptarnos y de defendernos; y por lo tanto el mismo cortisol, que es la hormona que nos alerta y nos induce a escapar del peligro; ésta ha sido considerada una hormona resiliente. También esta actitud positiva hacia la vida, podemos aprenderla.

Y de hecho, el trabajar un pensamiento positivo que no es un pensamiento histérico o siempre dogmático hacia lo bonito, hacia lo bueno; sino que es un pensamiento que te pone los pies en la tierra y te induce a buscar posibilidades, opciones, caminos para resolver situaciones que no puedes; es una de las herramientas más importante para irte ayudando a crear una personalidad que sea capaz de sacarte de las dificultades.

Somos resilientes y no lo sabíamos

Por otro lado, siempre tendemos a acentuar en nosotros las características negativas; claro que con vista a que las corrijamos; sin embargo, a veces se nos olvida que de pronto tenemos capacidades que no las reconocemos, y por lo tanto, no las utilizamos.

Es bueno revisar algunas cosas que hablan de la resiliencia en los seres humanos; porque estoy seguro que muchos de nosotros las tenemos.

Veamos este corto listado que he aprendido en mi experiencia como médico; y que de pronto mucha gente lo tiene como cualidad positiva hacia la resiliencia; por lo tanto, puede catalogarse como persona fuerte, positiva, luchadora y emprendedora.

1.- Soy autónomo

Esta es una de las características más importantes que tiene la gente moderna: La capacidad de autoabastecerse, de producir, de generar los medios con los que subsanar sus necesidades.

La gente no sabe que esta es una característica de la resiliencia.

La autonomía te da la capacidad de tomar decisiones en un momento determinado sin consultar con los demás ni tampoco con medir el impacto que tendrá en los otros; es decir, te da la oportunidad de resolver.

2.- Soy perseverante

En un mundo tan competitivo y donde hay que cubrir tantas etapas para poder tener un logro sólido, el hombre moderno ha tenido que aprender a ser perseverante y a trabajar la paciencia.

Las redes sociales nos muestran hoy en día miles de ejemplos de lo que es ser perseverante; e incluso los adiestramientos para ser emprendedores, muestran que la lucha es constante.

Que las dificultades son continuas y están en todas partes y que hay que mantener el trabajo, la lucha, la búsqueda y la creación de herramientas para solucionar problemas; por lo tanto, hay que ser perseverante.

Y esta es una de las principales características de la resiliencia, la perseverancia.

3.- Tolerancia ante la frustración

No hay nada que enseñe más al que se expone en las redes sociales, al que crea contenido que es lanzado para la crítica y la lectura de todos, que es a ser tolerante ante las opiniones y sugerencias de los demás.

Hoy en día tenemos la obligación de aprender que existen miles de puntos de vistas y que nuestros trabajos siempre van a ser considerados y leídos por gente de diferentes estratos sociales y de diferentes culturas, gracias a la tecnología de la información y las comunicaciones.

Eso significa que nunca va a faltar la opinión que frustre, la actitud que menoscabe la seguridad interna; por eso, hemos aprendido a leer, a entender y a desechar lo que simplemente no construye.

4.- Optimismo realista

Por todas partes de la red encontramos información y contenidos relacionados con la capacidad de ver al mundo en forma positiva; desde el ejemplo simple del vaso medio lleno o el vaso medio vacío, miles de personas nos enseñan a que existen maneras de ver las situaciones, los hechos y la vida misma en forma posible.

Para mí el optimista sabe que a pesar de las dificultades normales y de la oposición constante que existe en la existencia, siempre hay una salida, una solución o la posibilidad de volver a comenzar de nuevo.

Esto va enseñando a ser resiliente.

5.- La flexibilidad necesaria

En el mismo orden de ideas y con la experiencia misma de interaccionar con tantas personas, nuestro pensamiento va tomando una forma de desarrollarse más autónoma, independiente y flexible.

No solo tenemos poco a poco la capacidad de ir adquiriendo flexibilidad ante las opiniones de los demás y antes las distintas fuentes que nos dicen cómo solucionar una situación, entenderla, saber de dónde proviene; sino también que hemos ido aprendiendo a dejar pasar lo que no conviene, lo que para nosotros no es una buena opción.

Ser resiliente nos exige que seamos flexibles ante las opiniones y decisiones de los demás, e incluso, ante nuestras mismas sensaciones y decisiones, a no culparnos y a entender porqué la tomamos en un momento determinado.

Y si no sentimos que somos, aprendamos a serlo

La idea de ir revisando tendencias de la psicología actual respecto a lo que es el manejo de las emociones, lo que se conoce con el mindfulness, las teorías modernas sobre terapias para el control emocional como la meditación, el yoga y otras actividades que tienen mucha repercusión en el mundo moderno; es que nos permiten ir creando un estado de tranquilidad, serenidad y equilibrio.

Es importante saber cuánto hemos crecido siempre, evaluar nuestros logros, fortalecernos.

Que podamos entender que hemos crecido, qué tanto nos falta.

La resiliencia, además de ser una estructura necesaria para la supervivencia también es una manera de afinar y mejorar la personalidad, de llevarnos por el camino del equilibrio y de la felicidad.

Emilio Ríos – Venezuela

@Erigo580

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