El aguacate, fruto del aguacatero ( Persea americana ), pertenece a la familia de las lauráceas, formada por plantas leñosas que crecen en climas cálidos y entre las que se incluyen aromáticas como el laurel, el alcanfor y la canela.
¿De dónde proviene su nombre?
Su origen se encuentra en Centroamérica, en las zonas de México, Guatemala y las Antillas. El nombre deriva del azteca ahuacatl, que significa "testículo", probablemente debido a su forma, y de ahí su fama como afrodisiaco.
Los españoles la denominaron "pera de las Indias". Tiene, en efecto, forma de pera, piel dura y oscura, y alberga en su interior una única semilla redonda y de gran tamaño. La pulpa es cremosa, de color verde o amarillo pálido, con un sabor que recuerda a la avellana.
Al existir tantas variedades con diferentes épocas de recolección, el aguacate puede encontrarse en el mercado tanto en invierno como en verano. También los hay de diferentes especies por eso se les ve pequeños otros grandes, o con piel lisa verde y otros con piel negra rugosa.
Un aguacate mediano, con su hueso y su piel, pesa alrededor de unos 170 gramos, aunque los podemos encontrar de diversos tamaños. El aporte calórico del aguacate es alto si lo comparamos con otras frutas, ya que por cada 100 gramos de aguacate nos puede aportar unas 200 calorías aproximadamente.
Qué comemos cuando tomamos aguacate
* Compuestos bioactivos: Contiene fitoesteroles, luteína y compuestos fenólicos.
Potasio: Contribuye a controlar la hipertensión.
* Vitamina E: Vitamina liposoluble con efectos antioxidantes que ejercen efecto protector sobre las enfermedades cardiovasculares y el cáncer.
* Vitamina B6: Indispensable para el normal funcionamiento de los sistemas nerviosos e inmunitario.
* Ácido fólico: Vital en la prevención de enfermedades congénitas en el embrión.
* Fibra: Contiene fibra soluble e insoluble. Tiene efecto saciante y previene el estreñimiento, ayuda a controlar la diabetes.
* Ácidos grasos monoinsaturados: Nutrientes que marcan la diferencia con respecto a otras frutas.
Beneficios del Aguacate
El aguacate es un alimento rico en grasas, en su mayoría monoinsaturadas (tipo oleico), por ello, de elevado contenido energético. Consumir este tipo de grasas ayuda a reducir el colesterol, LDL y triglicéricos cuando reemplazan en la dieta a las grasas saturadas, contribuyendo así además a prevenir las enfermedades cardiovasculares
El aguacate conviene en todas las épocas de la vida y tan solo deben moderar su ingesta las personas con sobrepeso. Por los numerosos beneficios del aguacate, su consumo habitual es muy recomendable. Estos son los principales beneficios del aguacate:
1. Auténtica y sana mantequilla vegetal
Debido a que la cremosidad de la pulpa que confiere su riqueza en grasas, el aguacate se unta fácilmente, lo que lo convierte en una saludable mantequilla vegetal, alternativa excelente a las margarinas industriales.
Su composición nutricional hace que sea un alimento prácticamente imprescindible en las dietas vegetales altas en grasas, como la cetogénica.
2. Salud cardiovascular
El aguacate no solo carece de colesterol, sino que tiende a reducirlo en el caso de estar elevado. Por eso es adecuado su consumo para prevenir la aparición de problemas como la aterosclerosis (falta de flexibilidad de las paredes arteriales) o enfermedades coronarias (angina de pecho o infarto de miocardio).
Las grasas del aguacate insaturadas normalizan el colesterol, reduciendo el LDL o "malo" y aumentando el HDL o "bueno"
3. Recomendable para deportistas y embarazadas
Se trata de un alimento clave para quien practique deporte, sea niño, joven o adulto. Aporta nutrientes muy adecuados para casos de sobreactividad muscular (sobre todo minerales como potasio y magnesio), así como de desgaste energético (riqueza en lípidos y en carnitina, que ayuda a su aprovechamiento).
Las mujeres embarazadas, o que desean estarlo, pueden recurrir al aguacate como una fuente complementaria de energía y de ácido fólico, una vitamina que contribuye a prevenir nacimientos prematuros, así como defectos en la formación del cerebro y la médula espinal.
Además, al contener vitamina A, fortifica los ojos, la piel y los huesos del futuro bebé.
4. Relaja el sistema nervioso
Debido a que el grupo es rico en ácidos grasos, magnesio y vitaminas del B, el aguacate es un excelente alimento regulador del sistema nervioso, por lo que está especialmente indicado en situaciones de estrés tanto físico como mental.
5. Bueno para la vista
Recientes investigaciones destacan su riqueza en el carotenoide luteína, cuyo efecto protector de la visión reduce el riesgo de desarrollar cataratas.
6. Previene las arrugas
Es también un amigo de la piel. Con la pulpa se preparan mascarillas que ayudan a prevenir arrugas y tratar dermatitis o incluso quemaduras.
Para pieles grasas se prepara una mascarilla con dos o tres cucharadas de pulpa y el jugo de medio limón. Se masajea suavemente sobre el rostro (en dirección ascendente), se deja secar y se limpia con agua tibia o con agua de rosas.
Del aguacate se extrae también el aceite, de color verde oscuro, que nutre y suaviza la piel.
El aguacate es una fruta muy singular, con unas características únicas que lo encuentran en un excelente aliado en la cocina.
Aporta untuosidad y consistencia a muchas recetas, y puede utilizar indistintamente en la preparación de postres dulces y platos salados, ya sea como fruta o como hortaliza.
Utilizar el aguacate en la cocina resulta muy sencillo, pero tiene el inconveniente de que la pulpa se oxida con facilidad al contacto con el aire.
Cómo hacer madurar un aguacate
Para que el fruto madure completamente debe dejarse unos días en un lugar oscuro a entre 15 y 24 ºC, pero no hay que introducirlo en la antes nevera de que madure, ya que esto lo daña e impide que lo haga.
A temperatura ambiente los aguacates maduran en 3 o 4 días. Un truco para acelerar el proceso se puede introducir en una bolsa de papel junto a una manzana o un plátano.
Cómo saber si está maduro
Se sabe que el aguacate está en su punto si cede una suave presión con los dedos, aunque es preferible no tocarlo demasiado, pues se deteriora con facilidad.
Otra forma de saberlo es sacudiéndolo suavemente. Si se nota el hueso agitándose en el interior significa que está listo para comer. A partir de ese momento se puede guardar en la nevera para detener la maduración y conservarlo unos pocos días.
El aguacate, al igual que otras frutas tropicales, no soporta temperaturas muy bajas, por lo que no se aconseja congelarlo ni refrigerarlo por debajo de los 4 ºC.
Evita que se oxide con limón
Para evitar que se ennegrezca por esa oxidación es necesario añadirle un ingrediente ácido como zumo de limón o de lima, o bien envolverlo en una película de plástico o papel film que no deje pasar el oxígeno.
Para pelarlo se corta la fruta longitudinalmente con ayuda de un cuchillo bien afilado hasta alcanzar la semilla, se giran ambas mitades una contra la otra, como si se fuera a abrir un envase, y se separan. Luego se retira el hueso y se extrae la pulpa con una cuchara.
Cómo se elabora la mantequilla de aguacate para untar
La pulpa, machacada y mezclada con un chorrito de buen aceite de oliva y unas gotas de limón o pomelo, resulta excelente untada sobre unas rebanadas de pan integral o unas galletitas saladas.
Se puede cocinar
La forma más habitual de preparar y consumir el aguacate es crudo, aunque, con algunas objeciones, también se puede cocinar.
En muchos libros de cocina se pueden encontrar recetas que lo incluyen salteado u horneado. Ahora bien, la mayoría de los cocineros prefieren añadirlo crudo al final de la cocción (muchas veces en salsas, guisos y sopas) pues las cocciones prolongadas acaban confirmando cierto sabor amargo.
Por otra parte, las altas temperaturas pueden transformar su delicada consistencia, dándole una apariencia a huevo que resulta poco atractiva.
Guacamole, la receta con aguacate más exitosa
Un ejemplo de la capacidad para combinarse es el guacamole, una receta de origen mexicano elaborado a base de aguacate, cebolla, tomate, limón y algunas especias picantes, que pueden variar según el cocinero.
Este maridaje de sabores, tan popular en los países centroamericanos, ha contribuido a propagar el gusto por el aguacate en todo el mundo.
Se puede servir en aperitivos, acompañado de nachos o tortillas de maíz fritas o como guarnición de cualquier plato que se nos ocurra.
Además el aguacate combina muy bien con huevos, setas, aceitunas (y su aceite) y hortalizas como los puerros y la calabaza, entre otras.
Todo tipo de cremas y salsas
Con el aguacate como base y cualquiera de estos alimentos, se pueden preparar infinidad de cremas muy prácticas para rellenar verduras y crepes o para dar consistencia a sopas frías o calientes.
Puedes condimentarlo con comino, ajo, cilantro, albahaca o pimienta que le dan personalidad, aunque conviene no abusar de especias ni plantas aromáticas para no ahogar su sabor.
En la preparación de las salsas el aguacate despliega todo su potencial, aunque en ese caso conviene elegir los más aceitosos.
Basta con añadir un poco de pulpa a una mayonesa o vinagreta para elevarla a otra categoría. Se pueden crear salsas muy diferentes, para vestir platos de pasta o aderezar ensaladas, por ejemplo.
Amigo de los dulces
Su gran afinidad con los frutos secos y las frutas facilita mucho las cosas a la hora de crear postres, que resultan deliciosos y muy originales, y se pueden endulzar con frutas desecadas, una buena miel o sirope de arce.
De esta manera se pueden preparar helados, tartas, pudines y sobre todo mousses, para los que su textura melosa resulta idónea.
Otra forma de sacar provecho del aguacate es añadirlo a zumos de frutas, especialmente a los tropicales, o emplearlo como base para preparar batidos con leche vegetal de soja, avena o, mejor aún, almendras, pues al aguacate le gusta la compañía de los frutos secos.
Compra y conservación del aguacate
El aguacate se recolecta antes de estar maduro. En la mayoría de casos, llega a los comercios todavía verde y acaba de madurar en casa.
A la hora de un aguacate hay que comprobar que la piel no presenta puntos negros, manchas o cualquier signo que indique una excesiva maduración.
No obstante, conviene saber que una piel agrietada no siempre significa que esté pasado: algunas variedades tienen ese aspecto en condiciones normales.
Principales variedades de aguacate
Se distinguen hasta 500 variedades, las principales de las cuales son:
* Haas, la más comercializada, de pequeño tamaño oval, piel oscura y pulpa amarilla, disponible todo el año.
Bacon, disponible desde finales de otoño a principios de primavera, de tamaño mediano.
* Cóctel o dátil, alargada y sin hueso, que se cultiva en Israel y España.
Fuerte, de tamaño mediano o grande, piel fina y sin brillo, y pulpa cremosa, cultivada en África y España
* Pinkerton, variedad de invierno, alargada, de piel rugosa y semilla pequeña, cultivada especialmente en Israel.
Precauciones al consumir aguacate.
Dietas hipocalóricas: Las personas que sigan este tipo de dietas deben limitar el consumo de aguacates debido a su alto contenido en grasas.
Insuficiencia renal: Está contraindicado para personas que sufran debido a su alto contenido en potasio.
Alérgicos al látex: El aguacate puede producir reacciones alérgicas a algunas personas, especialmente a los alérgicos al látex.
A mi me encanta podría comerlo todos los días. Combina con casi todo... En Venezuela preparamos una salsa parecida al guacamole llamada guasacaca ,es deliciosa