Debo reconocer que me es difícil escribir sobre este tema, no me gusta mentir y menos engañar a las personas, creo que es, porque me lo pueden hacer a mí también, y simplemente no me gustaría.
No soy desconfiada, pero conozco un caso y no sé, si es estafa, pero cumple con mucha de las características; el cuento va así: Es una chica muy astuta, de marca mayor y egoísta. No sé, si ¿Será el hambre?, pero se convierte en una persona cruel, dejando a un anciano y a su hijo sin comida, luego de que se prepara un jugo, con un vaso de agua, una mandarina, y una cucharada de azúcar. Deja el vaso de jugo de mandarina, más espeso para ella, y él del anciano y el niño, le pone más agua.
Y con toda la comida, siempre se aprovecha, a veces para excusarse, deja que el anciano cocine y no prueba su comida, para no comérsela toda. El anciano con toda su bondad cuando ella cocina, lo único que sabe hacer, siempre le dice:
¿Otra vez arepa, sin mantequilla?
y ella contesta: no hay dinero, la única comida, de que disponemos en la casa, es arroz, harina de maíz amarillo y espagueti.
Existen muchos tipos de estafas; la anterior es de: las familias, las de amigos, las cibernéticas, las empresariales y etc.
Todas tienen el mismo esquema, obtener provecho ilícito a cualquier costa, en perjuicio de un tercero, que puede convertirse en delito, dependiendo las características. Sin entrar en tecnicismo de derecho civil u otro, ya que no soy abogada.
En cuanto a promesas incumplidas, fidelidad, y todas las otras evidencias de mala fe, de muchas personas, hacen que cada día este mundo sea más desconfiado, los GoFundMe, que es una excelente plataforma para solicitar y recabar fondos, muchas veces ha sido criticada por esconder estafadores. Pero salvando esta dura realidad, el hecho es que la labor que trae esta plataforma ha hecho mucho bien, a muchas personas.
Si nos ponemos analizar, el perfil psicológico de una persona estafadora, debe tener por lo menos un complejo de inferioridad palpable, ya que quiere buscar reconocimiento por su pírrica hazaña de maltratar a otro, en su moral y buena fe, y adicionalmente de los beneficios que consigue, entre ellos el dinero.
Las estafas, se establecen cuando hay una necesidad palpable, en nuestro país, se da muy frecuentemente porque, hay necesidad imperiosa de dinero, afecto y/o llamar la atención y caemos ante falsas promesas, de una vida de oropel.
Las estafas en las relaciones de trabajo o de pareja, donde es muy notable que las mujeres en su gran mayoría quieren cambiar al hombre luego de que se casen. O donde se prometen ascenso con importantes aumentos salariales, luego de una noche de pasión, con tu Jefe y resulta que las expectativas del Gerente, cambian a la mañana siguiente, porque ya consiguió lo que quería.
Es duro pero, puede hasta peligrar la vida de alguien si, se engaña a otra persona, sin contar que tienen sentimientos y se puede hacer una idea de una vida juntos, hasta los confines del tiempos, descubriendo que el tipo, es un sátrapa.
Tantas malas historias de engaños, trampas, ardides, fraudes que se pueden presentar en nuestras vidas, que solo resta decir: tengan los ojos abiertos y sepan reconocer a un mentiroso/sa, estafador/ra, que solo viene a perjudicar, tú casa, trabajo, o cualquier ámbito donde te desarrolles. Debemos estar alertas, ante estos seres humanos tóxicos.
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El anterior escrito, forma parte de la dinámica de 30 temas en 30 días, propuesta por mi Patrocinadora Diamante @SaraEscribe
Gracias a todos, por leerme, reciban caluroso abrazo. Saludos cordiales a @SaraEscribe. Un abrazo.. y gracias por todo.
Algo que me parece interesante de las estafas (que no las hace buenas) es la creatividad que traen consigo, deben ser estudiadas para que salgan bien y lo inescrupulosos que pueden ser os que las hacen, le da un toque perfecto de locura y falta de decencia. Lo peor (tal cual como lo describes) es que se puede ver en cualquier estrato de la sociedad