La amistad un verdadero tesoro ¿Cuentas con buenos amigos?

Hace poco conversaba con una amiga que el valor de tener tan solo un buen amigo hace más llevadera la vida. La ausencia de buenos lazos y amistades cercanas afecta muchísimo a nuestro bienestar mental y espiritual.

Hay estudios que demuestran lo crucial que es tener no sólo buenas amistades, sino relaciones de calidad, y que a mayor cercanía e intimidad, mayor beneficio para ambas partes. Siempre es bueno poder conversar, compartir buenos momentos, y despejar nuestra mente, gracias a un buen momento con un gran amigo podemos mejorar nuestro estado de ánimo.

No es lo mismo convivir con alguien, y no sentirse comprendido o escuchado. Aunque puede que hablen todo el día, si no aflora la empatía entre ambas partes, de nada sirve hablar por hablar. Más vale una conversación sincera que muchas palabras sin valor.

También debemos tomar en cuenta que muchas amistades son circunstanciales, es decir, dependen de un trabajo, los estudios o un hobby, quizás esta última perdure más, ya que están unidos por algo que les gusta hacer, aunque esto podría cambiar en el tiempo, y terminar dejando de frecuentar dichas actividades, y también a esas personas.

¿Cuántas veces has sentido que tu y tu amig@ no reman en el mismo sentido? ¿Qué tienen intereses diferenres? Incluso, muchas veces las personas quieren salir a tomar y de fiesta, y quizás tú no quieres ir, te apetece algo más tranquilo, y te sientes obligado a ir por no quedar mal, o no dejar a tu amig@ sol@. Mientras más diferencias en los gustos, menos actividades en común tendrán.

Toca aceptar que a veces ya no nos unen las mismas cosas, que quizás nos demandamos cosas que no podemos darnos, y que no pasa nada si no sienten que es igual, o que no tienen ganas de hacer las mismas cosas. Se trata de soltar y dejar ir.

Quizás se frecuenten menos, pero el cariño siga alli intacto. Más vale un tiempo de calidad, que la cantidad. Quizás sea mejor sincerarse, y encontrar momentos en los que se sientan a gusto ambas partes, y disfrutar de esos momentos. Y si notas que ya ese amigo no tiene el mismo interés, y que eres tú quién insiste, debes comprender que muchas veces las personas cumplen su rol, y tienen que irse, es de sabios apreciar lo que nos dejan y poder despedirse desde el cariño y la gratitud por haber compartido momentos tan importantes.

¿Ustedes han tenido siempre buenos amigos? ¿Han hecho otras amistades y han dejado ir a viejas amistades? ¡Cuénteme!

-Imagen tomada de lanacion.com-

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