El ánima sola
“Dice la leyenda que existe un alma en pena conocida como el ánima sola, la cual vaga errante eternamente siendo condenada a sufrir el ardor y la sed de las llamas del Purgatorio. En vida perteneció a Celestina Abdenago, que fue condenada por Dios por negarse a dar agua a Jesucristo pese a ser la encargada de dar agua a los condenados a la cruz. Aunque se la dió a Dimas y Gestas, se la negó a Jesús debido al miedo a los judíos que lo condenaron”.
Esta leyenda, que en otras versiones dice que la mujer le dió vinagre a Jesús cuando le pidió agua mientras llevaba la cruz o que se trata de una mujer muerta durante la guerra de la independencia, nos deja ver la importancia dada al ámbito religioso en ese país. Las creencias respecto a ella pueden variar: hay versiones que creen que es un espíritu que busca redención y otros que es un ser malintencionado, capaz tanto de hacer el bien como el mal.
El ánima sola “Dice la leyenda que existe un alma en pena conocida como el ánima sola, la cual vaga errante eternamente siendo condenada a sufrir el ardor y la sed de las llamas del Purgatorio. En vida perteneció a Celestina Abdenago, que fue condenada por Dios por negarse a dar agua a Jesucristo pese a ser la encargada de dar agua a los condenados a la cruz. Aunque se la dió a Dimas y Gestas, se la negó a Jesús debido al miedo a los judíos que lo condenaron”.
Esta leyenda, que en otras versiones dice que la mujer le dió vinagre a Jesús cuando le pidió agua mientras llevaba la cruz o que se trata de una mujer muerta durante la guerra de la independencia, nos deja ver la importancia dada al ámbito religioso en ese país. Las creencias respecto a ella pueden variar: hay versiones que creen que es un espíritu que busca redención y otros que es un ser malintencionado, capaz tanto de hacer el bien como el mal.