Vale la Alegría.
Las penas serán saldadas
No me da pena decir,
que de vez en cuando, mi sonrisa es cómplice de caída con tacones, y si ellos,
que he pasado por semáforos en rojo,
que piso la grama, mi abuela decía: "mijito mientras más la pise más crece".
Ayer anduve revisando las penas propias y ajenas
aquellas que te detienen el andar,
aquellas que te hacen recordar que tienes vida y, tal vez, un alma que pide ser libre para reunirse con otras almas, en pena, para contarse sus alegrías
Me di cuenta que mis penas son
Simples
Pasajeras
Diminutas
Sin complejos y, a veces, necesarias
Las penas ajenas las escucho con atención, cuando me las cuentan, les pongo mi sazón, cuando las invento repitiendo: "tengo pena ajena"
Creo que mis penas están saldadas porque las he pagado con vale la Alegría y las he juntado con el adiós del olvido.
Wilson Solano
Junio 2020
Tiempos de cuarentena
Vale la Alegría. Las penas serán saldadas No me da pena decir, que de vez en cuando, mi sonrisa es cómplice de caída con tacones, y si ellos, que he pasado por semáforos en rojo, que piso la grama, mi abuela decía: "mijito mientras más la pise más crece". Ayer anduve revisando las penas propias y ajenas aquellas que te detienen el andar, aquellas que te hacen recordar que tienes vida y, tal vez, un alma que pide ser libre para reunirse con otras almas, en pena, para contarse sus alegrías Me di cuenta que mis penas son Simples Pasajeras Diminutas Sin complejos y, a veces, necesarias Las penas ajenas las escucho con atención, cuando me las cuentan, les pongo mi sazón, cuando las invento repitiendo: "tengo pena ajena" Creo que mis penas están saldadas porque las he pagado con vale la Alegría y las he juntado con el adiós del olvido. Wilson Solano Junio 2020 Tiempos de cuarentena