Que delicioso es darse vida de vez en cuando, el día a día nos absorbe en ocasiones, y nos olvidamos de darnos un detalle a nosotros mismos. Pero cuan bueno es cuando nos permitimos un momento de despeje, y bien sea a la antigua o a lo moderno, pero nos damos a despejarnos un poco al aire libre, leer por un rato un buen libro en una tabla o mirando letras sobre papel, y luego reflexionar sobre ello recreando nuestra vista con un bello lugar, mirando a la distancia. Es fabuloso, se relaja todo el cuerpo, todo nuestro ser nos lo agradece, y nosotros se lo agradecemos a Dios por habernos dado la dicha de estar en un maravilloso lugar diseñado por sus manos para nosotros.
Gracias Señor por las cosas buenas que has hecho para nosotros :)
Muy verdadero, todos necesitamos algunos momentos de relax