Nada es imposible si te propones como meta lograrlo, mi primer consejo es que coloques tus proyectos en oración, Dios tiene siempre el control, y el segundo consejo es que te enfoques, sin perder el ánimo. Cuando comencé en el mundo de las criptomonedas lo hice de manera autodidacta, investigue muchísimo, absorbí todo cuanto pude, de tal manera que cuando entre en los diferentes mercados no estaba tan perdido.
Mis primeros inicios fueron el Arbitraje y he de confesar que me genero muchísimos dividendo, porque es la forma más sencilla de aumentar tu capital en criptoactivos, mi meta siempre fue generar ganancias con cada operación lo cual siempre me resulto, no hubo un momento de perdida solo en las páginas que hackearon y actualmente se encuentran en estado de liquidación.
Luego quise probar el Trading y aquí se me complico un poco la cosa porque tuve algunas perdidas, pero quiero decirles que las tuve porque mi enfoque no era el correcto, estaba yo pensando en dólares, siempre, y no me di cuenta que ese no es la meta al principio sino al final, quizás piensas que es de locos dejar de pensar en dólares y no lo es, en el trading la meta es aumentar la cantidad de una o varias criptomonedas que te gusten, comenzando por las que “tienen poco valor” lo aprendí tarde pero aun así las pérdidas fueron compensadas con la reciente alzada de la gran mayoría de las criptomonedas. En ambos casos tanto Trading como Arbitraje, generan ingresos.
Son un arma de doble filo