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LA TRAICIÓN A LA PRIMERA REPÚBLICA EL ORIGEN MAS ANTIGUO DE LOS MALES DE VENEZUELA
Por Alonso Camacaro
La Primera República fue un intento de legalidad para establecer el imperio de la ley. Fue edificada sobre la constitución de 1811. La cual fue redactada por el abogado patriota y republicano Juan German Roscio y se convirtió en la capitanía general de Venezuela en una República Federal Descentralizada (Estados Unidos de Venezuela). Esta constitución eliminaba el poder monárquico y centralizado que desde Caracas, ejercía la oligarquía de los mantuanos. De esa manera, el poder del gobierno se repartía entre las diferentes provincias que conformaban el territorio de la antigua capitanía general.
El 2 de julio de 1811, se presentó en el Primer Congreso de las Provincias de Venezuela, una moción sobre la independencia. El 3 de julio de 1811 se inició el debate en el Congreso. El 5 de julio se declara la independencia. El 7 de julio de 1811, se aprobó la redacción de la Primera Constitución de Venezuela. El 11 de julio de 1811, seis días después de la Declaración de la Independencia, estallaron dos insurrecciones contra la naciente república, la de los isleños canarios en Caracas que fue controlada con rapidez, y la insurrección de Valencia.
Los mantuanos, que no toleraban que algún patriota no mantuano, estaban al mando del ejército, nombraron comandante militar al Marqués del Toro –hombre sin experiencia militar– para enfrentar la sublevación valenciana, pero el 15 de julio es derrotado. Esa situación obligó a los mantuanos a designar a su adversario Francisco de Miranda, como Jefe del Ejército y venta con sus tropas hacia Valencia el día 19. Las acciones de calles y plazas fueron reñidas. Francisco de Miranda ordena atacar las posiciones más fuertes de los rebeldes y el 23 de julio de 1811, Miranda y los patriotas republicanos toman la ciudad de Valencia.
El 21 de diciembre de 1811, el Congreso aprobó la Constitución Federal de los Estados de Venezuela, dando nacimiento a la Primera República. El carácter federal y descentralizado de la constitución que dio origen a la Primera República, jamás agradó a la oligarquía caraqueña, constituida por los “mantuanos” o herederos de los primeros conquistadores. Pues, esa constitución les quitaba el poder monárquico, autoritario y centralizado que hasta entonces estuvo ejercido desde Caracas, sobre el resto de las provincias que estuvo conformado la capitanía general de Venezuela. Pero, la aprobaron transitoriamente. Para después modificar el sistema aprobado.
El 1 de marzo de 1812 se instaló el congreso de la república en Valencia. El 2 de mayo de 1812, el General Francisco Miranda, nombró al Coronel Simón Bolívar Comandante Político y Militar de Puerto Cabello, la fortaleza más importante que tenía la ex Capitanía General de Venezuela en ese momento. El 26 de marzo de 1812 se produjo el terremoto que destruyó Caracas ocasionando grandes daños y la muerte de cerca de 20.000 personas. Desgracia que fue usada por la iglesia católica como argumento –castigo de Dios por seguir a los herejes Miranda y Roscio– para desmoralizar a las patriotas.
El 30 de junio de 1812, Simón Bolívar se ausentó del Castillo "San Felipe" de Puerto Cabello. Dejando al mando a su segundo, el isleño canario Francisco Fernández Vinoni, quien liberó a los isleños y españoles que estaban presos por haber participado en la rebelión de Valencia de 1811. Los españoles tomaron la fortaleza y apuntaron los cañones hacia la población central de Puerto Cabello. La artillería del castillo arrasó la ciudad durante cinco días, haciendo que sus pobladores abandonaran la ciudad. Lo cual derrotó a las fuerzas patriotas. El 6 de julio de 1812, en la mañana, Bolívar abandonó Puerto Cabello embarcándose por Borburata, acompañado tan sólo de ocho oficiales.
El general Miranda, nunca recibió los refuerzos que sus adversarios mantuanos, debían enviar desde Caracas para contraatacar a los españoles. En consecuencia, desesperado y una derrota brutal, Miranda firmó la capitulación del ejército patriota el 25 de julio de 1812 en la ciudad de San Mateo, marcando el fin de la Primera República. La capitulación era un acuerdo que consistió en la entrega de las armas por parte de los patriotas. A cambio, los realistas respetarían personas y bienes.
La Capitulación de San Mateo, por esos insondables vericuetos que tiene la historia, terminará catapultando a la fama a Simón Bolívar y sepultando a Francisco de Miranda; no en el olvido, pero sí enterrándolo en vida hasta su muerte definitiva. Posteriormente los mantuanos culparon a Miranda de haber fraguado la traición por haber recibido treinta mil pesos
Al día siguiente de suscrita la capitulación, Miranda decide abandonar Venezuela. Ordena que sus archivos personales sean puestos a salvo a bordo de un barco inglés. Incluso, queda todo expedito para que él se embarque a bordo del Sapphire. El 29 de julio las fuerzas victoriosas de Monteverde entran en Caracas y, contra lo pactado en San Mateo, comienzan a perseguir y apresar a los patriotas, lo cual era una descarada violación de la capitulación.
Entre el 30 y el 31 de julio un grupo de oficiales patriotas, al informarse de lo pactado en San Mateo, consideraron que renunciar a continuar peleando era inadmisible, constituía una verdadera traición. Que resultaba imperioso apresar a Miranda y, como corolario de ello, desconocer la capitulación e incluso fusilar a Miranda, como era la opinión de Bolívar.
Cuando Miranda iba hacia La Guaira, para embarcarse y abandonar el país, fue detenido —junto a otros 8 jefes— por sus cámaras antiguas, entre los que se encontraban con el joven Simón Bolívar quien pedía su fusilamiento. Los apresados fueron acusados de dilapidar los caudales públicos y seguidamente fueron entregados a los realistas. Miranda fue encarcelado en Puerto Cabello, después fue trasladado a Puerto Rico y por último al Arsenal de la Carraca, en Cádiz, donde falleció en 1816.
Desde la caída de la Primera República comenzó y se enraizaron todos los hombres que azotan a Venezuela: el centralismo caraqueño y el caudillismo militarista; herramientas que sirven para cambiar gobiernos en nombre de alguna revolución que, coloca en el control del Estado a una piara que en el nombre de Bolívar atracan la nación y se apropian de las riquezas de Venezuela, para ponerlas en manos de los bancos extranjeros, quedándose con una porción del saqueo.
El verdadero enemigo de la libertad y el progreso de los venezolanos es el centralismo caraqueño apoyado por el caudillismo que caracteriza a la casta militar venezolana. Por eso, es urgente y necesario, rescatar el poder civil, a partir de la educación cívica, para que cada venezolano conozca y practique sus deberes y reclame sus derechos. Ese proceso de reeducación de los ciudadanos y reseteo del Estado, puede tardar hasta veinte años y solo podrá iniciarse en una sexta república, con una nueva constitución federal y descentralizada, similar a la de 1811.