El joven sastre
Erase una vez un joven sastre que había aprendido todo sobre lo necesario para crear bellos vestidos y trajes el cual era conocido en donde vivía.
Un día se entero que a su pueblo vendrían un gran sastre con muchos años de experiencia y tomaría aprendices para viajar con el por un tiempo y enseñarles todo lo que el había aprendido.
El joven sastre se preparo para el día en que llegara el gran sastre compro herramientas nuevas para usarlas ese día y también telas que de la mejor calidad.
El día llego y el gran sastre llego al pueblo, camino por unas horas, visitando todas las tiendas de ropa y anunciando que todos los que deseaban unirse a el en su viaje deberían ir a la casa donde se hospedaría al día siguiente y debían llevar todas sus herramientas de costura junto con todas sus creaciones no vendidas.
El joven sastre fue a la casa del gran sastre con algunos de de sus amigos.
La casa en la que el gran sastre se quedaba no era muy lujosa ni tampoco era una gran construcción pero lo que si tenia era un gran patio.
El gran sastre recibió a todos los potenciales aprendices que estaban en el pueblo y los guio hacia el patio donde estaban una gran cantidad de telas y maquinas de coser al estar todos reunidos dijo:
-Cada uno de ustedes tome una maquina de coser, la tela que desee y cree el vestido mas hermoso que puedan hacer.
Todos los posibles aprendices se sentaron en una maquina de coser y tomaron una tela para comenzar a trabajar, entre ellos nuestro joven sastre.
Pasaron las horas y el joven sastre tenia casi finalizado su vestido era un hermoso vestido color azul de fiesta.
El gran sastre se levanto de su asiento y paso ´por cada maquina de coser y les decía algo al oído a cada uno de los sastres y al pasar por el joven sastre dijo:
-Valla alguien tan joven con mucho talento, bueno ahora toma el vestido y quémalo.
El joven sastre estaba atónito por lo que había escuchado pensaba: quemar este bello vestido con lo que me ha costado.
Pero luego pensó: el maestro dijo que tenia talento si debo quemarlo es por algo.
Y varios sastres se levantaron para quemar sus vestidos y volvieron a iniciar.
El joven sastre mas animado que antes comenzó a hacer un nuevo vestido.
Luego de unas horas creo un hermoso vestido largo color negro muy elegante con una rosa negra a un lado.
Luego al finalizar la mitad de la tarde todos los sastres habían terminado sus vestidos y el gran sastre dijo una vez mas quemen todos los vestidos que han creado.
Muchos sastres se molestaron por lo que habían escuchado y empezaron a quejarse.
Muchos se fueron con sus cosas y los vestidos que habían creado.
El joven sastre dudaba de lo que debía hacer pero apretó sus dientes y decidió comenzar una vez mas.
Ya he quemado 2 vestidos ahora este sera mas hermoso que los demás sera un vestido como ninguno.
Al pasar las horas llegando la noche muchos sastres ya habían desistido quedando solo unos pocos los que finalizaron sus vestidos.
Al finalizar todos el gran sastre dijo:
-Me encantan sus vestidos son muy hermosos no he visto vestidos tan bonitos en mucho tiempo ahora no les pediré que quemen los vestidos que acaban de hacer.
Todos se alegraron y estaban emocionados por lo que había escuchado pero luego el gran sastre dijo:
-Muy bien ahora quiero que quemen todos los vestidos que han creado antes de este.
Todo quedo en silencio por 1 minuto y luego todos rieron porque creían que era una broma.
El maestro dijo:
-Chicos esto no es una broma quiero que quemen todos sus trabajos anteriores.
Luego todos empezaron a hablar:
-Maestro esto debe ser una broma.
-Maestro hemos trabajado mucho en esto.
-Si los quemamos ¿que haremos que vamos a mostrar entonces?
El gran sastre dijo:
-Bueno esa es mi condición si no quieren hacerlo pueden irse justo ahora pueden llevarse los vestidos que han creado.
Casi todos se fueron de la casa unos molestos y otros tristes solo se quedaron 3 entre ellos el joven sastre y preguntaron:
-¿Maestro de verdad es necesario hacerlo?
El maestro respondió:
-Si hacen los que les dije no solo sabrán si es necesario sino que les enseñare muchas cosas mas.
Los 3 sastres dudaban de que debían hacer hasta que poco a poco se acercaron a sus cosas y quemaron sus vestidos uno con cara triste, otros con cara de duda y otro con miedo en sus ojos.
-Bueno chicos les dije que les daría su respuesta y eso haré dijo el sastre.
-Lo primero que quiero que sepan es que desde hoy son mis aprendices y sus vestidos de hoy son sus primeras creaciones todo lo anterior a partir de hoy no existe.
Pasaron los años y el gran sastre y sus tres aprendices viajaron por mucho tiempo creando y vendiendo los vestidos mas bellos del mundo.
Un día el joven sastre le pregunto al gran sastre:
-¿Maestro dígame porque cuando porque cuando nos convertimos en sus aprendices no pidió quemar tantos vestidos?
El respondió:
-Muchos me han hecho esa pregunta y la verdad es que es algo complicado de explicar mi aprendiz mas joven pero siéntate te contare todo.
-Cuando les pido que quemen sus vestidos es porque quiero ver su determinación, quiero ver si están dispuestos a acabar con aquello que les ha costado tanto por algo mejor ustedes tres cada vez que quemaban un vestido que les costo tiempo y esfuerzo el siguiente era cada vez mas bello.
-Y cuando les dije que quemaran todo lo que han creado es porque deseaba que ese vestido de esa noche fuera su peor vestido porque si ese lograba ser su peor vestido a todos les gustaría ver el mejor.
-De seguro te preguntas si todo eso es realmente necesario y la verdad es que no, pero cada día que haces algo debes estar dispuesto a comenzar de nuevo algún vestido.
-Recuerda es mas fácil iniciar de cero que tratar de reparar algo dañado.