¿El Bullet Journal es para todos?

En su concepto más sencillo, un bullet journal es un método organizacional analógico en el cual únicamente se requiere de una libreta (de preferencia punteada), un lápiz y unos marcadores, pues con ellos se elaboran un semanario o una agenda personalizada en donde apuntar sus quehaceres. Los más creativos la decoran con pegatinas y dibujos originales de los colores más vibrantes y diversos; algunos incluso practican en ella el famoso lettering u ortografía artística. Los más ahorrativos y no muy creativos prefieren elaborar su agenda de la forma más minimalista posible.

Es un método ideal para estudiantes, profesionales del arte y diseño, y creadores de contenido, dado que pueden apuntar notas y asuntos prioritarios. También es un método excelente para individuos desorganizados y olvidadizos como yo, pues nos ayuda a mantener una rutina decente, recordar fechas de importancia e incluso ayudarnos a establecer o recuperar ciertos hábitos que descuidamos debido a los avatares cada vez más exigentes de la vida.

Ahora bien, ¿es este método apto para todos, sin importar edad y ocupación?

Mi respuesta en corto sería un "depende".

Hay muchos factores que pueden llevar a una adopción exitosa o nula de este método. El primero de ellos es la disciplina. Parece mentira, pero apuntar cuáles son tus quehaceres del día, llevar un control de tus gastos y hábitos, o agendar algún evento de importancia es un hábito que lleva su tiempo adquirirlo y perfeccionarlo. Cabe mencionar que es normal que se nos olvide apuntar si ya tomamos nuestra medicina o algún evento previsto para tal fecha; no siempre tendremos un control sobre lo que nos pasa, en especial si hay eventos inesperados que nos dejan aturdidos por un momento.

Un segundo elemento a considerar es el tipo de actividades que realizas. Si eres un abogado, un psiquiatra, o un ejecutivo de alto nivel, este método no es conveniente para ti o para quien lleve tu agenda, pues su uso se limitaría exclusivamente al manejo de citas. Caso contrario si eres un trabajador autónomo, un creador de contenido o un estudiante; el bullet journaling te permite dosificar el horario según lo que hagas.

Otros elementos a tener en cuenta es la paciencia y la constancia. Ambos van de la mano con la disciplina, pues elaborar tus semanas es un constante ensayo y error, en especial si eres de aquellas personas que están aprendiendo a dibujar o que estén buscando temáticas particulares. Así que si eres alguien que se desespera con facilidad, no recomendaría aplicar ese método... A menos que tu intención sea aprender a ser paciente y pienses que hacer un bullet journal sea el medio más óptimo para lograrlo.

¡Nos vemos en un próximo post!