Mudarse nunca es una tarea simplista, pero la mudanza siempre está repleta de nuevas oportunidades. Una nueva oportunidad para empezar de nuevo, conocer gente, hacer amigos, descubrir un nuevo restaurante favorito, una cafetería, un parque infantil… ¡Dios, muchas cosas buenas!
Pero la pregunta es: ¿cómo moverse con una mascota?
Encontrar un nuevo hogar
Para ser bueno para ti, también debes ser bueno para él. No estás pensando en mudarte y dejar atrás a tu amigo, ¿verdad? Es fundamental consultar con el nuevo inquilino si acepta animales, en caso contrario, deberá buscar un lugar más adecuado para vivir con él.
Teniendo en cuenta que la Constitución Federal nos garantiza el derecho a usar nuestras casas como nos plazca, lo que incluye tener animales, incluso en condominios, y ninguna ley o regla local puede anular la Ley Mayor. Pero depende de ti decidir si quieres comprar esta pelea en movimiento o no.
Importante: la nueva casa debe tener pantallas y no debe tener rutas de escape.
Proceso de cambio
Casa en tiempos de cambio es una locura total. ¡Son cajas y más cajas! Ya no sabemos dónde están las cosas y, a veces, empacamos lo que aún necesitamos usar. Donde quiera que empiece, las cosas de su mejor amigo deben terminar al final.
Déjelo tener los juguetes, caminar, alimentarse y beber hasta el último momento. Preferiblemente, llévelo con usted. Tan pronto como llegue a la nueva casa, necesitará sus cosas, todas con su olor.
Pre-cambio
Antes del día de la mudanza, es importante concertar una cita con el veterinario. Hoy en día, la sedación ya no es la indicada, pero es necesario analizar cada caso de forma aislada.
Es común que se sientan mal y existen medicamentos específicos para perros y gatos. No se puede recetar ninguno sin consultar a un especialista, ¡no automedique a su mejor amigo!
Además, si el viaje es en autobús o avión, existen una serie de exámenes y certificados que deberán presentarse al momento de comprar el boleto y al momento de abordar. Si la mudanza es al exterior, las demandas son aún mayores.
Día de la mudanza
¡He aquí, llega el gran día!
Si tienes un cachorro, levántate un poco temprano y da un largo paseo. Es bueno que se ejercite bien antes de pasar unas horas en el transporte.
La alimentación debe ser moderada, como forma de reducir las náuseas o incluso, los posibles vómitos.
Si viaja en automóvil, haga paradas cortas en lugares con poco movimiento. Esto será bueno para que, en el caso de los perros, puedan estirar un poco las patas.
MUCHA ATENCIÓN: mantener siempre a los perros atados. Evita el susto de que huya asustado por el movimiento del lugar. ¡La placa de identificación es obligatoria tanto para perros como para gatos! Si no se siente seguro al hacer la parada en boxes, no lo haga. La seguridad SIEMPRE debe ser lo primero.
Al llegar a la nueva casa
Si para nosotros el día de la mudanza es agotador, ¡¿imagina el animalito que no tiene idea de lo que está pasando? !
Si tienes un gatito, deja que elija un lugar seguro para esconderse. Dale tiempo. Los gatos son metódicos, no les gustan los cambios y suelen tardar en adaptarse a una nueva rutina o lugar. No es raro que no quiera comer durante un tiempo. Cuanto es ese tiempo 1 día, ok. Atención 2 días. 3 días, consultar a un veterinario.
En caso de que pierda el apetito, ofrézcale su sobre favorito. Los gatos necesitan ingerir proteínas para obtener taurina. En el caso de pérdida de apetito, tomar un pequeño trozo de carne magra, cocinar con abundante agua y una pizca de sal (no se pueden agregar especias: el ajo y la cebolla, por ejemplo, son tóxicos para ellos). Cocine hasta que la carne se desmorone. Ofrécele esa carne y / o caldo.
Sobre Taurina, si lo desea, podemos escribir un texto solo sobre el tema. El debate es grande: ¿cocinar carne o no? Hay mucho relacionado con este tema. Lo importante es que sepas que esta sugerencia no sustituirá a la alimentación ni a una consulta con el veterinario, pero sí puede abrir el apetito.
demás, dale tiempo. Deje una caja para que se distraiga. Afilarse las uñas es una terapia para gatos. Acarícialo, juega con él y presta atención. Las cosas se ajustarán.
Con los perros, la adaptación suele ser más fácil. Tan pronto como lo suelte en la nueva casa, es probable que corra por todas las habitaciones para verlo. ¡Debes oler las cajas y hacer una fiesta! Posiblemente, no habrá pérdida de apetito debido a la nueva casa. Pero aun así, es bueno estar atento a posibles cambios de comportamiento.
Al principio, todo puede parecer aterrador. Pero cálmate, pasará y las cosas se ajustarán.
Pero dime, ¿te has mudado? ¿Cómo fue el proceso de llevarse a sus mascotas?
¡Hasta la próxima!