¿Estudiar o no una carrera universitaria (en Venezuela) actualmente?
Escribo este articulo como una especie de respuesta a la publicación hecha por la compañera @SaraEscribe, quien como muchos sabrán ha sido precursora de la comunidad hispana en esta plataforma y que nos ha motivado a muchos de nosotros a participar en esta red social, por lo que personalmente le agradezco y le guardo aprecio. En el más reciente post que ella público, nos cuenta que ha decidido dejar de estudiar, refiriéndose según entiendo a que ha abandonado la carrera universitaria que venía cursando, eso me hizo reflexionar sobre la decisión que deben tomar los jóvenes en la actualidad, entre ir a la universidad o comenzar a trabajar para ganar experiencia o en su defecto emprender algún negocio propio.
Este tema es bastante delicado y polémico, además tratándose de venezolanos como es nuestro caso (creo que Sara al igual que yo es de Venezuela), es necesario ver el problema en su contexto, de forma objetiva y sin disimulo de la realidad en la que vivimos, para poder así abordar clara lo que significa la decisión de estudiar o no hoy en día para los estudiantes de este país, pues actualmente en mi país debido a la crisis estructural que nos afecta, es muy común que virtudes como el conocimiento, la experiencia en labores técnicas, la disciplina, la ética profesional... no sean muy valoradas que digamos dentro del territorio nacional, para quienes emigran la cosa puede ser distinta, pero para los que estamos dentro, aunque no en todos los casos por supuesto, normalmente prevalecen otros factores como el oportunismo, la picardía, la adulación, el amiguismo... Es común ver personas que no tienen ninguna formación hacer dinero por medio de negocios en los que revenden algún tipo de producto y otras que utilizan sus contactos o influencias para aprovechar las circunstancias de nuestra sociedad para sacar provecho de ello.
En cambio, quienes son profesores universitarios, abogados honestos (esos en vías de extensión que no viven de procedimientos turbios), ingenieros con gran conocimiento técnico, incluso trabajadores (obreros) con experiencia y disciplina, muy probablemente se encuentran en dificultades económicas, a no ser que hayan emigrado o se hayan dedicado al comercio revendiendo algo (principalmente alimentos). Esto hace que quienes pertenecen a las nuevas generaciones, vean con mayor agrado dedicarse al comercio o convertirse por ejemplo en gestores de algún tipo de documento utilizando influencias adquiridas en organismos del estado, que ponerse a estudiar durante varios años para luego no conseguir un trabajo en el que reciban un salario decente.
Otra cosa que desmotiva mucho a los jóvenes, es que la calidad de la educación venezolana ha desmejorado mucho en los últimos tiempos, es decepcionante para los estudiantes asistir a una institución educativa y notar que el conocimiento que allí reciben es muy pobre y que pueden aprender más mediante una buena investigación en internet. También están quienes se gradúan en estas universidades sin haber hecho nada por su cuenta para aprender otra cosa más que lo recibido en las aulas, por lo que terminan siendo mediocres en su área profesional, pero pretenden encontrar trabajo instantáneamente por tener un título y ser “profesionales”, entonces comienzan a divulgar que es falso que la educación produce bienestar económico, que más vale trabajar directamente y que la experiencia es la que realmente enseña lo que se necesita saber, de modo que quienes están por comenzar a estudiar ven esos ejemplos y se desmotivan de hacerlo.
Es difícil contradecir esto, cuando la evidencia que se observa en la calle parece confirmarlo, sin embargo, hay algo que muy poco se toma en cuenta por quienes aseguran que no hace falta estudiar, me refiero a la diferencia entre cursar una carrera universitaria, contrastado con lo que significa realmente estudiar, ya que estudiar es algo que actualmente se puede realizar perfectamente por cuenta propia (con excepciones por supuesto). Hoy en día, para aprender a realizar muchas labores que antes solo era posible aprender en una institución educativa formal, ahora solo se requiere un dispositivo de computación, conexión a la red y disciplina.
Con esto tampoco estoy diciendo que cursar una carrera universitaria sea inadecuado, ya que puede ser mucho más fácil seguir la ruta del autoaprendizaje cuando se utiliza como guía al cronograma impartido por los profesores, pudiendo contrastar sus enseñanzas con lo que se encuentra en la web y compartir opiniones o experiencias con otros estudiantes de forma presencial. Todo eso es muy importante para una correcta formación, ya que aprender únicamente de internet es bastante arriesgado, pues la cantidad de información es abrumadora y puede ser complicado apartar por uno mismo las cosas útiles de las que no lo son.
Mi opinión particular es que aun con una baja calidad en las instituciones de educación superior y las numerosas dificultades de transporte u otros obstáculos derivados de la crisis, lo más aconsejable es cursar estudios universitarios, eso sí, no hacerlo solo por el título que estas casas de estudio ofrecen, creo que ese papel se debe ver como algo añadido, lo que realmente importa es el conocimiento que bien sea directa o indirectamente la universidad nos proporciona, por lo tanto se debe tener claro que es posible, que en el futuro, al postularse a algún empleo fuera del país (dependiendo el lugar en que se busque trabajo) pueda que la procedencia de este título no genere una muy buena impresión, pero si realmente la persona aprendió algo por esfuerzo propio, no solo puede llegar a obtener cualquier empleo, sino que también podrá emprender por cuenta propia, ya que su conocimiento es real y no dependerá de la valoración que otros le den a un papel. No se estudia para obtener un título, se estudia para aprender.
Así mismo, una alternativa que también puede ser la correcta dependiendo el caso de cada quien, es la de estudiar completamente por cuenta propia o simplemente realizar cursos de diferentes cosas puntuales que en conjunto conformen un conocimiento solido en un ámbito particular, para esto se requiere mucha constancia, diciplina y planificación personal, pero no es algo descabellado o imposible de lograr, quizá pueda ser más complicado a futuro conseguir buenos empleos de esta forma, por no contar con un título universitario, pero ese paradigma de los títulos cada día se vuelve más un mito que una realidad, de modo que no es necesario ser ingeniero o licenciado graduado para contar con el conocimiento suficiente para desempeñar el trabajo que un cargo acorde a esos títulos amerita.
La decisión por ende debería estar entre, estudiar de forma tradicional en una universidad o estudiar por cuenta propia, lo que yo personalmente no recomiendo, es dejar de estudiar. Ciertamente en una sociedad en la que lo más rentable puede ser comprar y revender cosas, es posible que en el corto plazo no sea necesario tener mayor conocimiento sobre nada, pero eso no es lo correcto, creo que como seres humanos pensantes que somos, nuestro deber es cultivar ese cerebro prodigioso que poseemos, además muy posiblemente más temprano que tarde (espero que este próximo año), ese modelo de país autodestructivo que sufre actualmente nuestra Venezuela, llegue a su fin y entonces volverá a prevalecer la racionalidad y el mérito como motor de la actividad económica.
Quizá luego escriba un artículo en el que exprese mi opinión sobre esto de estudiar una carrera universitario o no pero ya visto desde un punto de vista más global, pues actualmente se está dando toda una revolución en relación con la forma de aprender y la de trabajar en el mundo, pero por el momento esto es todo, espero que mis palabras sirvan de algo a quienes estén en el punto de sus vidas en que les toca tomar esta decisión. Para concluir, quiero decir a los jóvenes que están en edad de salir del liceo y comenzar la universidad, que no posterguen esa decisión, mañana es tarde, estudien ahora que tienen la posibilidad, el futuro no lo conocemos, puede traer consigo muchas ocupaciones que impidan o dificulten la tarea de estudiar, además no solo estudien, también emprendan, prueben todo lo que tengan en mente, no lo dejen para luego, estamos en un mundo muy dinámico y lo peor es dejar pasar las oportunidades.
Sara creo que es de Bolivia, no recuerdo exactamente el país de su origen, pero si leí uno de sus primeros post donde halaba sobre, muy interesante, por cierto. Al parecer entre ese país y Venezuela hay varias similitudes. Y es cierto lo que dices, es algo difícil estudiar aquí, y como estudiante me desmotiva que no me enseñen lo que realmente necesito, hasta la educación secundaria es de baja calidad, recuerdo que vi tantas cosas, pero muy pocas de ellas son de utilidad en la vida real, con esto me refiero a que debería de ser más completa, como por ejemplo, en ingles, se algunas palabras y me conozco perfecto el verbo to be, pero de allí nada más. Son 5 años de bachillerato viendo inglés, y sales sin saber el idioma ¿qué sentido tiene? Aparte de ello cuando sales de la universidad conseguir trabajo es duro, siempre piden experiencia; el salario de un profesional es deprimente, comparado con lo que se ganaría como cajera o pasillero en una sucursal. Venezuela se ha convertido en el mundo al revés, y es realmente triste. Aún así sigo estudiando en la universidad, y aprendiendo por mi cuenta otras cosas, como libertad financiera, inglés, a ser mejor escritora (que es lo que me apasiona), diseño gráfico a punta de tutoriales en Youtube, y todo lo que desee aprender. También busco la forma de monetizar todo lo que hago, quizás me tardo un poco para algunas cosas, pero se que estoy haciendo una buena inversión: en mi conocimiento. Y con ello conseguiré grandes cosas, con la ayuda de Dios.