Hacer pan es algo que llevo haciendo desde hace unos años y la verdad es que no tiene nada que ver con los que compramos en el supermercado. Las ventajas de un pan casero hecho con masa madre son muchas: dura mas tiempo tierno, es mas sano y encima lo ha hecho uno mismo!.

En este caso he elaborado un pan con un porcentaje muy bajo de masa madre (1%), con una hidratación final de aproximadamente un 55% y una fermentación de entre 12 y 14 horas. Este pan pertenece al libro Pan de Pueblo de Iban Yarza, pero con algunas pequeñas modificaciones que hice sobre la marcha debido a la falta de algunos ingredientes.

Normalmente me gusta amasar los panes que hago a mano, pero en esta ocasión quería estrenar y probar una amasadora que compré recientemente, así que el amasado lo hice en ella.

Vamos con los ingredientes necesarios:

Ingredientes:

• 7 gr. de masa madre al 50% de hidratación ya refrescada

• 250 gr. de Harina de fuerza

• 250 gr. de Harina normal

• 280 gr. de Agua

• 10 gr. de Sal

Preparación:

La masa madre la tendremos que haber refrescado previamente, y de esa masa madre activa es de donde cogeremos los 7 gr. que pondremos en un bol.

Vertemos encima los 280 gr. de agua que deberán estar sobre unos 35º, y mezclamos bien para disolver la masa madre. Ahora sería un buen momento para encender el horno e ir precalentandolo a 250º o mas, si tu horno lo permite. También vamos a colocar una bandeja vacía (yo uso piedras volcánicas en su interior) para verter agua y generar vapor llegado el momento.

Ahora añadimos las harinas y la sal, y mezclamos con la ayuda de una cuchara (o en la máquina de amasar). El amasado debemos de hacerlo durante 5 -7 minutos, y debe ser un amasado duro, estirando la masa con la parte cercana a la muñeca, recogiéndola y repitiendo el proceso.

Ahora, colocamos la masa en un bol untado con un poco de aceite de oliva, metemos la masa dentro (previamente boleada), tapamos el bol, y dejamos reposar en un lugar cálido entre 12 y 14 horas.

Pasado este tiempo, sacamos la masa a la mesa ligeramente enharinada, y hacemos una especie de hatillo con ella, tirando de la parte exterior hasta el centro, luego le damos la vuelta y lo boleamos. Tapamos con el bol y dejamos reposar 20 minutos.

La masa estará algo plana, y con cuidado de no eliminar el gas que tiene hacemos un pliegue hasta el centro, y otro mas, sellando bien los pliegues, y repetimos el proceso una vez mas. Ahora, haciendo girar la masa sobre si misma por los extremos, la afinamos un poco hasta que tenga este aspecto:

Colocamos la masa en un trapo enharinado, con la parte sellada hacia arriba, tapamos y colocamos dos botellas o algo similar a los lados para evitar que la masa se extienda, y dejamos durante 30 minutos.

Llegó el momento de hornear. Colocamos la masa sobre un papel de hornear, ahora con la parte sellada hacia abajo, y hacemos un corte a lo largo con una cuchilla.

Metemos al horno, echamos un vaso de agua en la bandeja para generar vapor (cuidado con no quemarse) y cerramos el horno y lo apagamos durante 15 minutos. Pasado este tiempo, ya se debe haber generado la corteza, así que sacamos la bandeja del vapor y encendemos el horno con calor arriba y abajo, y dejamos hasta que el pan esté dorado.

Sacamos, dejamos enfriar sobre una rejilla, y a disfrutarlo! Si tenéis alguna duda, preguntad y os la resolveré.