Vampiros. Una historia de terror compartido (II): clases y trasfondos
Para participar en esta dinámica ‘rolera’ es imprescindible escoger una clase de personaje. Pero atención: una vez escogida no se podrá cambiar, así que elijan sabiamente.
Existen cinco clases de vampiros entre las que pueden elegir según sus preferencias. Pueden escoger el perfil de vampiro que más se ajuste a su propia personalidad, ¡pero también pueden elegir todo lo contrario!
Tal vez les resultará divertido interpretar un personaje que no se parece en nada a cómo son en la vida real.
Clases de vampiros
Los Iuvenis
Los Iuvenis conservan esa actitud propia de la juventud, e incluso de la adolescencia. Son inconformistas y a veces irreverentes. No es extraño que suelan cuestionar los métodos y las ideas de los antiguos y propongan nuevas maneras de comprender la noche. Incluso llegan a comportarse de manera anárquica, desobediente y rebelde.
A menudo cometen errores que suelen poner en peligro la mascarada porque son demasiado impulsivos. Pero también suelen ser vampiros con mucha energía, lo que les convierte es seres muy rápidos y ágiles. Sin duda la celeridad es su mayor virtud. Eso les permite subirse a la cornisa de un edificio de un solo salto o moverse tan rápidamente en la oscuridad, que ni siquiera con la visión vampírica de las demás clases, llegan a ser detectados.
Entre los humanos suelen pasar desapercibidos por un tiempo. Pero su eterno aspecto joven les obliga cambiar de lugar cada pocos años. Justamente cuando empiezan las sospechas sobre por qué ‘ese muchacho no madura’ o ‘esa niña no se hace mujer’.
Los animaliae
Estos vampiros están muy en contacto con su propia naturaleza. Suelen ser fuertes y con mucho carácter. A menudo, tienen mucha afinidad con la vida natural y se dice que hasta pueden comunicarse con todo tipo de animales. Es bastante habitual verlos viviendo en el entorno natural acompañados por alguna otra criatura. No son sus mascotas, sino parte de su manada que les han escogido como líderes del grupo. Se dice que algunos, incluso han llegado a adquirir el poder de metamorfosearse en lobo, en murciélago e incluso en una rata.
Si le preguntas a un animaliae, preferirá siempre alimentarse de humanos antes que de animales. Se sienten más próximos/as a los seres naturales que a los estúpidos humanos que todo lo arrasan.
Entre los humanos, les cuesta mucho pasar inadvertidos porque suelen desarrollar rasgos físicos muy salvajes. Por ejemplo, los vampiros masculinos pueden llegar a tener tanto vello en el cuerpo, y unos colmillos tan enormes, que pueden ser confundidos con bestias o con hombres lobo. Las féminas animalie suelen desarrollar orejas puntiagudas y ojos felinos. Las niñas de sus ojos suelen ser casi una línea vertical. Es por eso que a menudo suelen alejarse de las multitudes y viven como ermitaños o mujeres solitarias en mitad de los bosques o en la periferia de las ciudades. Siempre bajo la sospecha de los pueblerinos que suelen referirse a ellos como los locos del bosque, o la bruja que vive en la montaña. Algo que suele despertar el interés de la Inquisición…
Los optimatis
Los/las optimatis son vampiros muy educados e inteligentes, pero también manipuladores y altivos. Son como la aristocracia de los vampiros y la mayor parte de los líderes vampíricos suelen pertenecer a esta clase. Son cultos, elegantes y son capaces de manipular las mentes débiles de los humanos, pero también de algunos vampiros.
Solo con su presencia pueden imponerse en un salón lleno de gente, captar la atención de las multitudes, amedrentar a un enemigo o conseguir cambiar la voluntad de otros seres.
Sin embargo, suelen pecar de ser vanidosos y también de perder los estribos cuando no logran salirse con la suya o les contradicen.
Entre los humanos suelen adoptar la imagen de nobles. El Dux de Venecia, por ejemplo, es un optimatis. Es habitual que dominen la voluntad de algunos humanos y los usen como servidumbre… o como reserva de alimento.
Los atrifex
Son vampiros bohemios, de apariencias rocambolescas y colores llamativos, con mucha sensibilidad artística y gran capacidad creativa. Suelen encontrar maneras de hacer las cosas de un modo distinto e innovador. Algunos tienden a ser excesivamente hedonistas y sus inclinaciones artísticas suelen llevarles a alimentarse de formas ‘creativas’. No les basta con arrasar un poblado y acabar con sus gentes, sino que dejan los cuerpos colocados de maneras inspiradoras a modo de 'obra de arte'.
Les gusta jugar con sus presas y eso les lleva en ocasiones a revelarles su naturaleza vampírica antes de acabar con sus vidas. Pero claro, cuando alguna presa escapa, los testimonios que dejan son tan notorios que suelen crear graves problemas para mantener en secreto la existencia la sociedad de los vampiros.
Desde luego, pasar desapercibidos no es su estilo, aunque lo compensan con una tremenda capacidad de innovación y creatividad.
Los cruciatus
Estos vampiros no han renegado del todo de su naturaleza humana. Incluso se dice que algunos son capaces de ‘caminar bajo el sol’. Muchos/as de ellos/as parecen humanos, aunque en realidad poseen toda la fuerza y la voracidad de los vampiros.
Suelen ser muy ser muy reflexivos, reservados y silenciosos. Desde luego, no hay una clase mejor que los cruciatus para mantener la mascarada. Algunos han vivido durante años y años rodeados de humanos sin que ninguno sospechase de su verdadera naturaleza. Sin embargo, no pueden aceptar que hace siglos que dejaron de ser humanos para convertirse en criaturas de la oscuridad. Por eso, a veces, suelen fingir que comen y beben en alguna ceremonia humana (algo imposible para un vampiro) solo por el mero hecho de sentirse un poco más vivos. Esa suele ser la causa principal por la suelen ser descubiertos: tratan de aparentar humanidad, aunque hace mucho tiempo que la perdieron.
A menudo, viven atormentados por sus remordimientos. Tratan de no alimentarse seres humanos y sienten culpa cuando lo hacen. Sin lugar a dudas, si existe una clase romántica y melancólica entre los vampiros, son los cruciatus. Seres tremendamente voraces y poderosos, pero tristes y melancólicos, que no desean renunciar a aquello que una vez fueron.
Y estas son las cinco clases de vampiros existentes. Lo interesante es que haya diversidad de clases. De hecho, es posible que si alguna es menos frecuente, quienes la hayan escogido se vuelvan más necesarios/as para que la historia avance.
Así que ya saben, escojan su preferida y háganoslo saber en nuestro canal de noise.cash. Pero recuerden: una vez comenzada la dinámica ¡no se podrá cambiar!
Un saludo. Y vamos allá que... ¡ya no queda nada para empezar nuestra historia!
@Loucy
Aún me quedo pensando si participar de la dinámica, sigo indecisa en si podré con tanto material... Sin embargo creo que me inclino por una clase de vampiros, vamos a ver qué tal nos va?