La ciudad de Pattaya en Tailandia tiene el registro de poseer la mayor cantidad de prostitutas del planeta con 27,000 mujeres dedicadas a satisfacer un millón de hombres al año, eso representa 2.739,72 hombres diarios, 114,15 hombres cada hora, 1,90 hombres por minuto y millas de condones y litros de semen por mes. Pero existen otros tipos de estadísticas más negras que sitúan a Tailandia como la nación con más amputaciones de penes del mundo con alrededor de 33 casos registrados desde el año 1978 puede parecer poco pero para este tipo de incidentes supera por mucho al segundo lugar que es Suecia con tres casos y Estados Unidos con dos, el motivo violencia conyugal extremos.
Al parecer las esposas Tailandesas encontrarán un método para castigar a sus maridos infieles para hacerles pagar por su problema conyugal, el cual consiste en esperanzas de que ellos se queden dormidos para después cercenarle el miembro, en la mayoría de los casos documentados por las autoridades, las féminas han optado no solo por cortarlo si no buscan la manera de deshacerse de él, lo han lanzado a basureros, animales o por el retrete del baño para desaparecerlo.
El caso más reciente tendrá en el año 2018 cuando una mujer llamada Karuna Sanusan de 24 años descubrió que su marido le era infiel y espero que se quede dormido, tomo un cuchillo de 30 centímetros y cometa el acto de cortarle el pene, no conforme con eso lo lanzo por la ventana de su domicilio, los gritos de aquel hombre despertarón a los vecinos quienes llamaron a las autoridades, tiempo después fue llevado al hospital para evitar que muriera desangrado, las cirugías para reconectar nuevamente el miembro viril no fueron exitosas y el El hombre de 40 años tendrá alguna vez volver a un trasplante de órgano lo que llevará el tiempo antes de volver a tener una vida sexual normal.
Uno de los casos más médicamente conocidos fue el de John Bobbitt cuando en el año 1993 su esposa Lorena le corto el pene con un cuchillo porque este violaba y maltrataba físicamente, un peso del incidente John fue el combustible absuelto por los cargos de choque.
Sin duda estas acciones extremas por castigar a los maridos infieles en Tailandia solo refleja los machos que hay que superar como sociedad, no hay justificación para que la violencia de género se convierta en una bandera para los nuevos movimientos feministas que están surgiendo en la actualidad que lejos de ofrecer soluciones solo llevan al caos social.
Espero mar del agrado de todos este artículo.
Hasta la próxima.
no estoy de acuerdo con lo que hacen las esposas por la infidelidad .lo correcto seria que se divorcian y listo se acaba el problema.