Los gritos, ese "levantamiento de voz" que surge como recurso en muchas ocasiones, que intimida y paraliza, pero que también en muchos casos genera rabia, y resentimiento.
Estoy segura que la mayoría de quienes leen este escrito, han recibido gritos, seguramente de sus padres, maestros, amigos, hermanos y su pareja. incluso hasta de un desconocido ...
Cuando alguien te grita, activa algo en tu cerebro, que no se exactamente qué es, pero que te provoca gritar también, incluso insultar, pero tal vez haces lo posible por no sucumbir ante tal instinto, porque sabes que las cosas empeorarán, sin embargo hay quienes no pueden controlarrse y acceden a gritar también, a insultar, reprochar y criticar, y entonces la situación se torna más que incómoda, tediosa e irritante ...
¿Qué pasa si te acostumbras a los gritos?
Es posible que si creciste recibiendo gritos de tus padres, y personas cercanas, cuando llegaste a la adultez conseguiste amigos, jefes y parejas que te gritan.
Esa es la regla general, pero no en todos los casos es así.
Ahora bien, si te has acostumbrado a recibir gritos, aunque los odies y no te gusten, pero estás envuelto en un círculo donde constantemente te gritan, entonces te has acostumbrado, o tal vez resignado ... eres "torpe" y haces las cosas mal, te la pasas "metiendo la pata" y en vista de tus pocas cualidades para hacer las cosas bien, es necesario, y razonable que te griten ...
Pues NO! No mereces los gritos de nadie, por más errores que cometas, Tampoco nadie merece recibir gritos de parte tuya.
Si tienes hijos, por favor, por lo que más quieras, NO les grites, por más agotado que estés, por más desobedientes que sean, aunque el estrés te esté matando ... busca alternativas, inventa nuevos métodos y estrategias para que las cosas fluyan y vayan mejor ... pero ¡baja la voz!
Si eres de los que gritan a su pareja, igualmente, controla tu tono, es bien desagradable, que te estén gritando ... y definitivamente tu pareja "hace" que te descontroles y no puedas evitar los gritos, tal vez esa persona no es buena para ti. Aunque allí hay muchas opiniones encontradas ... y puede ser tema para otra ocasión.
El caso es que de ninguna manera los gritos son buenos, y considero que no ayudan a nada, al contrario, pueden empeorar las cosas ...
"Utiliza palabras no gritos, pues es la lluvia la que hace crecer las flores, no la tormenta"
Anónimo
Y a ti, ¿quién te grita? ¿Cómo lidias con ello?
Gracias por leerme.
Hasta la próxima EscrituraKatarsis.
Muchísimas gracias por leer!