La humanidad es una especie de las peores que pueden existir. Somos unos seres tan calculadores y aprovechadores, que no tenemos ni siquiera un poco de empatía en esta pandemia.
Les cuento lo que me sucedió…
Hace poco menos de 2 meses, he cambiado de proveedor de internet, ya que, en ese entonces, la que poseía, el servicio era muy malo. La actual compañía de internet que contrate se llama Infinet.
Anteriormente, poseía un servicio de internet de la compañía de Arnet (Telecom). Este servicio lo tuve desde que tuve mi primera computadora. Una Pentium 4.
El servicio siempre fue mediocre. Solo nos ofrecían 1 mega de velocidad de internet, lo que para hoy en día, no sirve de nada. Sin mencionar, que el costo por el servicio, era altísimo. Alrededor de 2.300 pesos argentinos, que incluyen el servicio de internet y del teléfono.
Nunca nos pudimos cambiar de internet, porque no había una empresa en la zona que ofreciera un servicio mejor, por ende, nos teníamos que conformar con Arnet.
Hasta que un día, llega un proveedor de internet, llamado Infinet, en el cual, ofrece un servicio de hasta 50 megas de velocidad de internet. Después tienes de 10 y 20. Estos pack están a un valor de 1.400 pesos argentinos. Si, muchísimo mas barato y de mejor calidad, ya que, su servicio es por medio de fibra óptica.
Por lógicas razones, decidimos dar de baja Arnet y el servicio de teléfono, Telecom. Esto lo hice en Octubre del 2020. Seguí todos los pasos para darlos de bajo y según ellos, el servicio quedaría efectivamente dado de baja luego de 72 horas hábiles. Me dieron el número de baja de la operación para poder certificar que lo había realizado. La persona de atención al cliente, me menciono que cuando mi teléfono no tenga, es porque el servicio ya había sido dado de baja. Bien...
Pasaron los días, y luego de 3 semanas, el teléfono se quedo sin tono y ya no teníamos internet. Yo me dije: “Bueno, ya esta, al fin me deshice de este servicio horrible”
¿Qué paso? Me llego una factura del servicio de teléfono del mes de Diciembre del 2020. Yo quede confundido, ya que el servicio fue dado de baja por completo. Me fije si tenía tono el teléfono y no lo tiene. Me pareció raro al principio, pero me dije que podía ser una simple confusión.
Al otro día, llamo a la compañía de Telecom sobre el inconveniente, y adivinen con que sorpresa me encuentro… El servicio de teléfono nunca fue dado de baja. Solamente fue dado de bajo el servicio de internet. Yo quede asombrado y de repente sentí un enfado, porque sentí que fui embromado por la empresa. Les digo que había dado de baja efectivamente el servicio, le pase el numero de baja del servicio de teléfono y resulta que este número no existe. No había ningún registro de se haya dado la baja. Yo les decía que era imposible. Que no tenía toda y esto paso días posteriores al haber dado de baja. Ellos en su “defensa”, decían que no importa que no tenga tono, que eso no quiera decir que no tenga servicio de internet, que eso puede ser una simple “falla técnica”. Sí, que coincidencia que la falla técnica surgió días posteriores al haber dado de baja el internet.
Claramente, la compañía Telecom, se aprovecho de mí. Se aprovecho de un cliente que cuando tenía sus servicios, siempre le pago en tiempo y forma. Es increíble como una compañía puede caer tan bajo, más encima que estemos afrontando una pandemia, donde la gente, económicamente, en mi país particularmente, no anda bien.
Arregle con la compañía con el tema de facturación, porque no la voy a pagar. Ni siquiera pidieron disculpas. Me hicieron entender que yo era el equivocado. De que yo tenía la culpa por no haber verificado que el servicio se haya dado de baja.
La verdad, no me arrepiento de nada en haber cambiado de servicio de internet. El actual servicio de internet que poseo funciona perfectamente. Si tengo algún tipo de inconveniente, me lo solucionan al instante, solo tengo que enviarles un mensaje al Whatsapp. Estas son las cosas que hacen que una empresa crezca. Estar siempre a disposición del cliente y tratar de satisfacerle todas sus necesidades con respecto al producto que se ofrece. Hacerlos sentir a gusto y contentos. Nunca tratar de estafarlos, ni nada por estilo, porque tarde o temprano, el cliente se dará cuenta.
Nunca se aprovechen de nadie. Es una actitud denigrante y deshonrosa. Pierdes mucho más de lo que crees que vas a ganar.
Si algún día escuchan a la compañía llamada “Telecom”, denle pulgar abajo.
Lo que me a mi me hicieron, de seguramente se lo hicieron a muchas personas. Tal vez, algunas personas pagaron sin saber porque. Tal vez, estafan de otras maneras las personas, como por ejemplo: El precio que ofrecen sus servicios.
Como sea, aprovecharse de las personas en un momento tan delicado, es imperdonable.