Naturaleza

«¿Qué razón tendría Dios para tomar una ruta evolutiva? Si su único objetivo en la creación de un universo fuera poblarlo con seres humanos, no tendría sentido producirlos mediante un largo proceso evolutivo. Pero hay otras buenas características del universo que Dios tiene buenas razones para producir. Ya he comentado la belleza del universo inanimado que se muestra en el desarrollo de las galaxias, estrellas y planetas. Dios tiene todas las razones para llevar a cabo este proceso de desarrollo desde el Big Bang por su belleza, incluso si fuera la única persona que lo observara. Pero, por supuesto, no es la única persona que lo observa. Podemos observarlo a través de nuestros telescopios que llegan cada vez más lejos en las primeras etapas del universo. Y Dios tiene la misma razón para crear plantas y animales... su belleza. Y los animales son buenos también, he argumentado, en virtud no sólo de su belleza sino también de su capacidad de tener sensaciones agradables y creencias verdaderas y de hacer espontáneamente buenas acciones (aunque no sean las elegidas libremente). En vista de todo esto, no es demasiado sorprendente que Dios tome la larga (por nuestra escala de tiempo) ruta evolutiva para producir cuerpos humanos. Y similares, aunque argumentos más débiles, mostrarían que no es sorprendente que Dios produjera cuerpos humanos por una ruta aún más larga de atravesar más que el universo para lograr este objetivo.»

— Swinburne, R. (2004). The Existence of God.