Las Aventuras de Corcho Marcano 8

En espera

 Adamaris terminaba de publicar un relato candente en su Canal favorito de Noise, su jefe el detective Corcho Marcano, se alistaba para abandonar la oficina temprano otra vez, apenas eran las 4 de la tarde.

- Jefecito ¿ para donde va ?.

- Ha ganarme unos pesos en el roji-negro, no ves que no llevo mi chaqueta de aviador y tampoco al Querubín.

- Siempre se me olvida que cuando sale disfrazado de taxista es el Águila!!!

- No te burles Adamris!!!.

- ¿ Y nada que regresa esa gente jefecito ?.

- Nada, la señora Arismendi me informo que se iban para su hacienda en los llanos unos días, pero ya van para dos semanas.

- Mmmmm, ya que va a salir, ¿ me da la cola ?.

- Bueno, pero apúrate que estoy de afán.

 Adamaris, apago la Pc y guardo el resto de sus cosas en menos de 5 min, bajando las escaleras unos pasos detrás de su jefe, abajo el turco Rahib, los saluda al verlos salir juntos.

- ¿ No es muy temprano para cerrar la oficina por hoy ?.

- No ha caído otro cliente, me toca taxear.

- ¿ Para cuando es la partida de domino donde los policías ?

- En estos días, cuando me den letra te aviso, necesito ganar unas partidas, así que ponte pilas turco.

- Adiosito turco, le decía pícaramente Adamaris mientras se montaba en el roji-negro.

- ¿ Te llevo para tu casa Adamaris ?

- No jefecito tengo que hacer una vuelta en el centro, cerquita del Banco Mundial.

- Carajo te debería cobrar la carrera !!!, jajaja.

- No se queje, que secretaria como yo no consigue más nunca.

 Eso era verdad la yunta que había hecho con Adamaris ya llevaba muchos años, aunque era un desastre, le formaba sus peos, hablaba hasta por los codos, Corcho Marcano sabía perfectamente que todo Sherlock necesitaba un Watson. En unos minutos llegaron al centro y a una cuadra del Banco Mundial se baja Adamaris.

- Gracias Jefecito, no se preocupe que esa gente vuelve porque vuelve!!!.

- Bye Adamaris, salúdame a tu viejita.

 Ya el segundo adelanto de la señora Arismedi se había difuminado, Rigoberto Calderón su esposo, luego de la fallida persecución que lo llevo a resolver el caso de la niña secuestrada, se había comportado como un boyscout por 4 días estuvo tras su pista y los 4 días salía de casa, a la oficina, luego a comer, en un restaurante o al club y de regreso a la casa a las 4pm, ¿ se habrá dando cuento que lo seguía ?, se pregunto el Águila.

 No pudo seguir cavilando sobre el único caso que había tenido en meses porque un portento de mujer lo detuvo en todo el frente del Banco Mundial, un mujeron de aquellos, con un enorme bolso negro.

- Déjeme ayudarla a meter el bolso en la maleta señorita!!!.

- No hará falta, aquí esta bien conmigo.

- ¿ Ha donde señorita?.

- Al aeropuerto, si me hace el favor.

La bella joven le da un billete de 100$, que el Águila guarda sin revisar, al abordar pudo notar un pequeño pero sexy tatuaje de una rosa en el tobillo de su clienta, ¿ que llevara en ese bolso negro ?, se ve muy pesado, pensaba el taxista mientras tomaba camino rumbo al Aeropuerto de Ciudad Caótica, si su única clienta no regresaba pronto a la ciudad le iba tocar pasar muchos días detrás de el volante de su roji-negro en espera de volver a su verdadera pasión ser detective privado.

Fin.

Contenido Propio @BigBDP 18.08.22