Venezuela
La inflación es un proceso caracterizado por el alza continua de todos o casi todos los precios de los bienes y servicios que se transan en una economía. Es decir, es un proceso de aumento continuo y generalizado de los precios de los bienes y servicios que se comercializan en la economía.
De acuerdo a este concepto, un incremento de rubros en un momento dado, no es una condición suficiente para que se determine la presencia de un proceso inflacionario en la economía.
En el caso particular de los productos agrícolas, debido a condiciones climatológicas, ciertos cultivos pueden verse afectados, provocando estacionalmente una falla del equilibrio entre la oferta y la demanda, lo que puede generar un incremento de los precios. Pero se trata de una situación transitoria y una vez que se superan las causas naturales que originaron tal condición, debe volver la estabilidad de los precios.
En un proceso inflacionario los precios de la mayoría de los bienes y servicios aumentan de manera persistente, a diferencia del caso antes mencionado, el de los productos agrícolas, no se trata de un desequilibrio coyuntural entre la oferta y la demanda, sino que este comportamiento permanecer en el tiempo. Los consumidores observan que los precios aumentan, sin que esto desaparezca en el corto plazo.
La intensidad del proceso inflacionario está relacionada con la magnitud que alcanza la tasa de variación del indicador que se utiliza. Sin embargo, la calificación de muy baja, baja o alta surgió del contexto y la realidad que vive cada país.
A escala internacional los estudiosos de la economía coinciden en que tasas de inflación de un dígito (menos de 10% anual) son aceptables, sin embargo, es necesario considerar las características y los niveles de desarrollo de cada país. Entonces, en términos numéricos se hablará de inflación baja a muy baja cuando la tasa promedio de variación intermensual de los precios sea cercana a 0%, como por ejemplo 0,1%, 0,3% o 0,4%; las cuales equivalen a tasas de variación anual proyectadas de 1,2%, 3,6% o 4,8% (inflación de un dígito).
Si la tasa promedio de variación intermensual de los precios se sitúa en un dígito, como por ejemplo 1,5%, 3,0% o 5,0%, la correspondiente tasa promedio anual se proyecta en dos dígitos, 18,0%, 36,0% o 60,0%, en cuyo caso se estará en presencia de una inflación alta o muy alta. Finalmente, la inflación se considerará severa cuando la tasa anual esté cerca del 100% o más.
Cuando las tasas de variación anuales son elevadas, durante una serie consecutiva de años, se origina una espiral, un círculo vicioso, en donde la inflación estimula más inflación y las tasas pueden llegar a superar los tres dígitos; en este caso se habla de un proceso hiperinflacionario.
La inflación de Venezuela (desde el año 2007) de mide mediante la evolución del indicador estadístico Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), anteriormente era mediante el Índice de Precios al consumidor (IPC) del área metropolitana de Caracas, Maracaibo, entre otros . Este indicador mide el cambio promedio registrado en un período determinado, de los precios en el ámbito del consumidor (precios al por menor), de una lista de bienes y servicios representativos del consumo familiar (canasta familiar), con respecto al nivel de consumo vigente para un año escogido como base.
De lo anterior, se puede extraer que la inflación causa que los precios de los bienes y servicios aumenten, por tanto, disminuyendo el poder adquisitivo del salario que devengue un trabajador. Es por esto que estudiar la evolución del salario sin tomar en cuenta el efecto inflacionario en una economía como la de Venezuela no es de utilidad, ya éste que fenómeno disminuye la capacidad de compra, y Venezuela se ha caracterizado por ser uno de los países con la más alta tasa de inflación en los últimos cuatro años.
Para determinar la pérdida o ganancia de poder adquisitivo de la moneda, la misma debe reexpresarse por inflación hacia la fecha en la cual se quiere realizar la comparación.
Esto se realiza mediante la siguiente fórmula:
Valor reexpresado = Valor nominal x Factor de ajuste
El valor nominal representa el valor del elemento objeto de reexpresión medido en cantidades monetarias de una fecha específica.
El factor de ajuste es la variable que reexpresa el valor nominal en valor reexpresado y se calcula mediante la siguiente fórmula:
Factor de Ajuste = INPC Actual/ INPC de Origen
Siendo el INPC Actual el correspondiente a la fecha en la cual se realiza la comparación y el INPC de Origen el que corresponde a la fecha del valor nominal.