Historia que nadie pidió (2)
Durante la Segunda Guerra Mundial, los Aliados mapearon los agujeros de bala en aviones que fueron alcanzados por fuego nazi.
Buscaban fortalecer a los aviones, reforzar áreas fuertemente golpeadas por artillería enemiga, para poder resistir aún más esos embates.
Su pensamiento inmediato fue reconstruir y reforzar las áreas del avión que tenían mas puntos rojos (o que recibían mas balas). En teoría, era una deducción lógica. Después de todo, estas fueron las áreas más afectadas.
Pero Abraham Wald, un matemático, llegó a una conclusión diferente: los puntos rojos solo representaban el daño en los aviones que llegaron a casa.
La áreas que realmente deberían reforzar, eran los lugares donde no había puntos, porque esos son los lugares donde el avión no sobreviviría al ser golpeado.
Este fenómeno se llama sesgo de supervivencia. Es cuando miramos las cosas que sobrevivieron cuando deberíamos centrarnos en las que no.