Calma

Estando en mi casa, ¿quién me entiende?, me levanto con energía, con las pilas altas, y me dedico hacer la comida y llevar la rutina diaria, pero hay algo, que me la trastoca, e inmediatamente me salgo de mis casillas y no hago nada, me rindo rápido, no sé, porque me pasa esto, creo, porque soy planificada y las cosas deben salir perfectamente, como yo lo tengo en mi mente.

Me llamo a botón, y me digo, todo con calma, y hago la tarea del chek list, ¿qué hice?, ¿qué me falta por hacer?, ¿qué me importa tres pepinos, que no haya hecho?, y así voy soltando en el árbol de las preocupaciones, voy cortando ramas y ramas.

Tengo el mal hábito de dejar las cosas para después, pero cuando me propongo, me propongo; quiero hacerlo todo yaa! Y me llevo por delante a quien sea, es como cuando limpio los gabinetes de la cocina, que cosa tan fastidiosa, por dios, pero que bien y como se enorgullece uno, cuando están limpios y sin grasa.

Del mismo modo, espero que las situaciones pasen, cuando a mi esposo, le diagnosticaron que tenía dos bacterias en el corazón, yo me dije…Ajá y ahora que sigue, medicamentos, cirugía o que (osea, yo tan tranquila, como si de una picada de mosquito, se tratara) nunca pensé, en la muerte o en medicamentos de por vida, él, era joven y yo también, era una vida cuadrada. Y yo tranquila.

Cuando me dijeron, varios médicos, juntas médicas, estudios van y vienen, segundas, terceras, cuartas opiniones médicas, me empecé a asustar, lo que implicaba y el diagnostico; cuando mi hermana, médico con post-grado en cardiología, neumología, terapista intensiva y en Gerencia de Salud, me dice: seriamente y apuntando en un libro gordísimo de medicina, lee aquí, ¿tú entiendes lo que significa, la enfermedad de tú esposo?

Ves, ¿cuánto es la esperanza de vida de esa enfermedad? (Cardiopatía, congénita de origen viral por bacterias) es de, tres años, eso fue en el 2006.  Gracias a dios, mi esposo esta magnífico “un milagro viviente”. Yo, entre en caída libre, hacia la llorantina y verme en un futuro criando a una hija sola, derrumbando todos los planes que teníamos y cambiando mi vida… era todo un AUXILIO!!

Creo que me dio calma, fue mi esposo, es un guerrero, el simplemente me dijo: 40 años (que era su edad, para ese momento) sin tratamiento, 40 años con pastillas, “será”.

Diooos, eso, se me quedo grabado, y dije: así será, y a fuerza del coctel de medicamentos, él ha sobrevivido hasta el sol de hoy. Con los tropiezos de sincopes, y ACV, cuando pasamos un momento durísimo, aquí en Venezuela, donde no se conseguían las medicinas, y no sé podían recibir de fuera.

Ahora, lleva una vida normal, “calidad de vida” nunca fumo, era senderista, ahora va todos los domingos a la cota mil, que es una autopista, que se cierra por completo, y caminamos mucho, a veces hasta una o dos horas, ya sea, por la falta de transporte y efectivo, este es la única parte positiva, de vivir en este régimen, narcotraficante, tiránico, salvaje y comunistoide, que nos gobierna en estos momentos, y adicionalmente mi esposo, sorprendiendo a cualquier médico que lo atienda, con su fracción de eyección de 10%.

La vida es un ratito, y si no aprendemos, la vida y las circunstancias te lo enseñan a valorar, somos muy quejones, y llenos de defectos, tenemos que dar gracias por todo, desde respirar en adelante, todos los dias.

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Gracias a todos, por leerme, reciban calurosos abrazos.

Saludos cordiales a mi Patrocinadoras Diamante  @SaraEscribe y la Súper Estrella @Loucy. No olviden pasar por sus cuentas, son espectaculares!.